La asociación de plantas ha sido tradicional en la historia de la jardinería. Tanto romanos como árabes hacían buen uso de ella. En el Renacimiento era habitual rodear los arriates de plantas aromáticas para ahuyentar plagas diversas.
Hay toda una variedad de plantas que nos pueden ayudar a proteger el jardín y el huerto de esas plagas molestas. Las Lamiáceas en general (melisa, albahaca, tomillo, menta, salvia) son de las mejores plantas para remedios naturales. Pero en este post nos vamos a centrar en plantas cuya sola presencia ahuyenta ciertas plagas.
Os pasamos una selección indicando la plaga que repelen:
- ajo: insecticida y fungicida
- consuelda: contra babosas
- capuchina: insectífugo
- lavanda: insectífuga
- melisa: contra pulgones, mosquitos, mosca blanca y hormigas
- menta piperita: contra pulgones
- ruibarbo: repulsivo contra orugas y larvas de diversos insectos, y contra pulgones
- ruda: repulsiva contra gatos e insectos. ¡Puede provocar alergias en personas sensibles!
- salvia oficinal: insectifuga
- saúco: contra topos, topillos y ratones de campo
- tagete: contra nematodos y gusanos del suelo
- tanaceto: insectífugo
- tártago (hierba topera): contra babosas, ratones y topos
- tomillo: contra pulgones y orugas
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